EFE
Esta ha sido la semana en que, oficialmente, España ha vuelto a entrar en recesión. Aunque para la mayoría de la población la crisis estaba presente en su día a día desde hace ya mucho tiempo, lo cierto es que técnicamente hacen falta dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo para que se acuñe el término en los papeles oficiales. El lunes, el Banco de España confirmó una caída del PIB del 0,4% hasta marzo, que se une al retroceso del 0,3% registrado entre octubre y diciembre. La pregunta ahora es ¿hasta cuándo?
La recesión tiene visos de quedarse en el país, al menos, algunos trimestres más. Según el panel de analistas de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas), la economía caerá un 0,8% en el segundo trimestre respecto al primero, lo que supondría un fuerte desplome desde el 0,4% actual (si bien es cierto que el consenso de analistas de Funcas también empeora la estimación del Banco de España hasta un 0,6%).
En cualquier caso, de lo que no hay duda, según la Fundación de las Cajas de Ahorros, es de que «los indicadores disponibles correspondientes al primer trimestre de 2012 apuntan a una nueva caída del PIB» pues, tanto la inversión, como el consumo apuntan claramente a la baja.
Y es que la tranquilidad de los últimos meses ha sido virtual. Las operaciones de financiación llevadas a cabo por el Banco Central Europeo (BCE) en diciembre y febrero lograron suavizar la crisis de la deuda en los primeros meses del año, conteniéndose al tiempo las caídas del PIB tanto en España como en el resto de la zona euro.
Sin embargo, la barra libre no ha solucionado «los problemas de fondo que se encuentran en el origen de la crisis». Y, de hecho, según el panel de expertos de Funcas, «España sigue despertando dudas en torno a su capacidad para corregir el déficit público, la salud de su sistema financiero y la debilidad de sus fundamentos económicos, de modo que en marzo retornaron las tensiones a los mercados financieros, con España esta vez, junto con Italia, en el ojo del huracán».
Además, el Banco Central Europeo ya ha manifestado su intención de no retomar los programas de compra de deuda pública, lo que no hace sino dar una vuelta de tuerca más a las perspectivas económicas nacionales. «Se prevén tasas de crecimiento del PIB negativas todo este año, que irán moderándose hasta pasar a positivas a partir del segundo trimestre del próximo», sentencia el panel de previsiones de las cajas.
El paro, al alza
Funcas también es pesimista en cuanto a que España vuelva a ser capaz de crear empleo; la tónica general es que seguirán destruyéndose puestos de trabajo a medio plazo. «La previsión de crecimiento del empleo en 2012 se ha recortado en 0,6 puntos porcentuales, hasta un -3,3%, en consonancia con la revisión a la baja del PIB. En 2013 se espera que el empleo se vuelva a reducir en un 1,4%. En cuanto a la tasa de paro, también las cifras han sido revisadas al alza para los dos años considerados, hasta un 24% y un 24,6% respectivamente».
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