La isla de Menorca es un paraíso, no solo para los turistas y paisanos de la zona, también para el fraude.
Las construcciones ilegales, ampliaciones y reformas sin declarar. La picaresca se extiende por los 702 kilómetros cuadrados de la isla. El ministerio de Hacienda ha encargado la tarea de prevenir y destapar el fraude urbanístico de la zona a alguien muy especial: un dron.
Tal y como recoge el diario 'Menorca', los vuelos de este avión espía, que empezó su tarea en 2013, se justifican como un «procedimiento de lucha contra el fraude para aflorar inmuebles que están disfrutando de los servicios públicos municipales a costa de los titulares de los inmuebles correctamente declarados».
De momento, este dron —en manos del catastro inmobiliario de Menorca—ya ha detectado 2.500 construcciones irregulares en la mediana de las Islas Baleares. Ha analizado construcciones de seis municipios de Menorca: Alaior, Es Castell, Ferreries, Sant Lluís, Es Mercadal y Es Migjorn Gran, y su misión durará todo el año.
Ni piscinas ni ampliaciones sin permisos escapan al ojo avizor de losefectivos vuelos de este dron. Y todavía faltan por procesar los datos de los pueblos de Sant Lluís, Maó y Ciutadella. La criba continúa en Baleares.
INGEYPRO INGENIERÍA Y PROYECTOS. OFICINA TÉCNICA DE CONSTRUCCIÓN
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